Litto Nebbia decidió despedir el 2011 haciendo gala de su prolífica labor artística con la publicación de dos nuevos álbumes: "11 (vidas)" con poemas de Alfredo Lichter y un álbum doble con sus clásicos que tituló "Historia de un creador".
En agosto pasado el cantautor ya había sacado un ambicioso trabajo integrado por tres discos y DVD denominado "La canción del mundo".
"Soy un laburante y no puedo estar quieto. Me la paso mucho tiempo en el estudio de Melopea y quería cerrar el año con estas producciones que ya las tenía en la cabeza y que hoy son una realidad", manifestó Nebbia en diálogo con Télam.
"En `11 (vidas)` -señaló- por segunda vez musicalizo palabras de Alfredo Lichter que es un amigo con el que compartimos, sobre todo, muchos gustos estéticos".
El artista rosarino aseguró que en yunta con Lichter, con quien en 2002 urdieron “Canciones desde Península de Valdés”, "en este momento sentí que teníamos la necesidad de compenetrarnos más en la tarea del escritor de canciones".
En la placa se encuentran piezas como "El cristal", "Autopista", "La calle de nadie sabe", "El piano de Bill Evans" (dedicado al poeta Horacio Ferrer), "Sobrenatural", "Noche en río" y "Otra mirada en el mundo".
Para encarar ese repertorio, Litto sumó -además- los aportes de Pablo Agri, Patricio Villarejo, Rodolfo García, Leopoldo Deza, Daniel Homer, Leo Sujatovich, Fabricio Rodríguez y la voz de Silvina Garré.
En cuanto al CD doble con clásicos propios "Historia de un creador", argumentó que "el hecho de juntar buena parte de clásicos en dos discos surgió de parte de mucha gente que me decía `quiero encontrar tal tema y me gustaría compilarlo con otros`, así que de esa forma y sin más misterios nació un disco que no tiene más ambición que unir con canciones las diferentes épocas de mi carrera".
Con ese espíritu, las placas unen temas de la pionera banda Los Gatos como "La balsa", "Viento dile a la lluvia", "El rey lloró", "Rock de la mujer perdida", "Madre escúchame" con perlas de su primera etapa solista como "Rosemary", "Mujer de los 1000 días", "Deja que conozca el mundo de hoy", "Vals de mi hogar" y "La ventana sin cancel".
El recorrido no deja afuera joyas de su vasto cancionero como "Sólo se trata de vivir", "Para John", "Quien quiera oír que oiga", "Yo no permito" y "Cuando yo me transforme".
Nebbia puntualizó que “tampoco quise dejar de lado piezas con Los Músicos del Centro”, formación que supo compartir con Juan Carlos Ingaramo, César Franov, Oscar Feldman y Horacio Ruiz Guiñazú y de la que escogió "Inseguridades", "Nueva zamba para mi tierra", "La guerra no sabe".
También recordó su unión con Lito Vitale y Lucho González ("Canción sin puñales", "Coplas del musiquero") y, según confesó, se dio un lujo al publicar “Tango de los abuelos, los padres y los hijos”, en versión registrada junto a Roberto “Polaco” Goyeneche y Adriana Varela.
"Me siento feliz con la edición de este disco porque logra el objetivo de reunir algunos clásicos con varias de las canciones más queridas por las distintas generaciones de mi público", evaluó.
Lejos de pensar que estas dos nuevas entregas cierran una etapa, el artista, de 63 años, avisó que “después de unas pequeñas vacaciones voy a continuar con mis presentaciones en el interior del país”.
De cara a ese futuro que ha forjado a fuerza de canciones que atraviesan y definen a la música popular argentina, contó que “estoy abocado a una nueva producción de estudio, música para películas y otras cosas que van saliendo”.
Télam
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