
Testimonio del día después del ataque del domingo en un parque infantil en la capital regional de Lahore.
El primer ministro, Nawaz Sharif, convocó una reunión para evaluar la seguridad tras el mortal ataque y fuentes oficiales dijeron a la prensa que en el encuentro se acordó emprender acciones contra los "supuestos colaboradores" de los grupos milicianos.
Durante el intenso operativo de búsqueda lanzado ayer la policía arrestó a más de 50 personas, entre los que se cuentan tres hermanos de Yousuf, informó la agencia de noticias Europa Press.
La información fue brindada por el Gobierno del Punjab, del que Lahore es la capital, en su cuenta oficial de Twitter, sin ofrecer detalles de las detenciones.
El director general de la Oficina de Información del Ejército (ISPR), general Asim Bajwa, afirmó en esa misma red social que las fuerzas de seguridad llevaron a cabo varias operaciones contra grupos insurgentes desde anoche.
"Las agencias de inteligencia con el Ejército y el cuerpo de Rangers han llevado a cabo cinco operaciones en Lahore, Faisalabad y Multan desde anoche, operaciones que continúan con nuevas pistas", dijo Bajwa a la agencia de noticias EFE.
En tanto, la ciudad de Lahore comenzó hoy a enterrar a las víctimas del feroz atentado suicida perpetrado contra un popular parque de la ciudad.
El joven Junaid Maish, de 16 años, fue enterrado en el área cristiana de Youhanabad, rodeado por la misma familia con la que el domingo pasaba la tarde en el parque de Gulshan Iqbal, donde el suicida hizo explotar las bombas adheridas a su cuerpo.
A pocos kilómetros de allí, en el área de Sageyan Pull, Iram Shezad, de 27 años, era despedida por 2.000 amigos y familiares, que no esperaban que la excursión de la joven al parque con sus primos acabase así.
Sheron Pitras, Waqar Pervaiz, Basit Amanat, Manhel Javiad y Salamat Yousaf fueron otras de las víctimas que habían ido a pasar una tarde de domingo a un parque y que hoy fueron enterradas, en una procesión de despedidas que se repitieron por toda la ciudad.
Larore es la segunda ciudad más grande del país, con siete millones de habitantes y su capital cultural. Es una urbe blindada por las fuerzas de seguridad, con soldados que patrullan las calles, ametralladoras y vehículos blindados circulando mientras se suceden los funerales de musulmanes, cristianos, niños, mujeres y hombres.
La portavoz del servicio de rescate de Lahore, Deeba Shezad, dijo que su organización entregó 30 cuerpos a sus familias y que estás habían comenzado a celebrar los funerales.
En tanto, en los hospitales continúan ingresadas cientos de personas, al menos 20 de ellas en estado crítico de salud y luchando por su vida.
Sharif, quien pospuso su viaje a Londres, también visitó un hospital para interesarse por los heridos.
El premier tenía previsto viajar este lunes a Londres para luego proseguir viaje hasta Washington, donde representará a Pakistán en la Cumbre de Seguridad Nuclear, pero postergó su viaje hasta el miércoles.
El país decretó un día de duelo por el ataque suicida en Lahore, de manera que las banderas nacionales fueron izadas hoy a media asta en todos los edificios gubernamentales.
Publicar un comentario
Click to see the code!
To insert emoticon you must added at least one space before the code.