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La Justicia ecuatoriana dictó la prisión preventiva para Aurelio Eduardo Rodríguez, alias "El Rojo", y Alberto Segundo Mina Ponce que habían sido detenidos el lunes por el crimen Marina Menegazzo y María José Coni. (Foto Archivo)






La Justicia ecuatoriana dictó la prisión preventiva para los dos hombres que fueron detenidos este lunes por el doble crimen de las turistas argentinas Marina Menegazzo y María José Coni cuyos cadáveres fueron hallados en la localidad de Montañita, donde estaban de vacaciones.




En tanto, el abogado del imputado Aurelio Eduardo Rodríguez (39), alias "El Rojo", afirmó que el otro detenido, Alberto Segundo Mina Ponce (33), cambió la primera versión que dio, "se declaró culpable" y desligó a su defendido de los asesinatos, aunque ambos continuarán detenidos.




Por su parte, el cónsul argentino en Guayaquil, Alberto Balboa, y los familiares de las víctimas no descartan la hipótesis que vincula a los crímenes de Marina (21) y María José (22) con una organización de trata de personas.




A través de la red social Twitter, la Fiscalía General de Estado de Ecuador informó que el juez multicompetente de Manglaralto, David Balladares, hizo lugar este martes al pedido del fiscal Eduardo Gallardo para mantener en prisión a los imputados Mina Ponce y Rodríguez.




A partir de ahora, se inicia la instrucción fiscal, en la que Gallardo deberá juntar todos los elementos de prueba que involucren a los imputados.




La prisión preventiva de los dos detenidos se dictó durante una audiencia oral que se desarrolló en la Unidad Judicial Multicompetente de Manglaralto, en la ciudad de Santa Elena, en la cual estuvieron presentes los dos hombres apresados.




Esta instancia judicial comenzó cerca de las 9 y el fiscal presentó los informes técnicos y los resultados de las autopsias y otros estudios forenses, especialmente respecto a los objetos de las víctimas secuestrados en la vivienda donde ocurrieron los homicidios.




En la audiencia de formulación de cargos, el detenido Mina Ponce, cambió su versión y dijo que Rodríguez no tuvo participación en el asesinato de las dos jóvenes, según precisó el abogado Atilio Alfonzo Pilco, defensor del último, no obstante el juez Balladares pidió la prisión preventiva para ambos.




Es que de acuerdo a lo informado días atrás por el fiscal Gallardo y por el ministro del Interior de Ecuador, José Serrano Salgado, el hombre había confesado la autoría de los crímenes de las mendocinas Menegazzo y Coni y había involucrado al otro detenido en los hechos.




Al respecto, Pilco dijo que "Ponce incriminó a 'El Rojo' porque lo presionaron", aunque no supo decir a quién se refería.




Por otra parte, el cónsul argentino en Guayaquil, Alberto Balboa, dijo que no descarta la hipótesis que vincula a los crímenes con una organización de trata de personas, tal como lo sospechan los familiares de las víctimas, aunque aclaró que se trata "una opinión personal".




"Todo puede ser, esto es una opinión personal. También hay parte de la familia que a raíz del estado de los cuerpos, que están totalmente irreconocibles, no cree que sean ellas", dijo el diplomático.




Balboa reconoció, además, que las familias de las víctimas "no están muy conformes con la investigación que llevó adelante la fiscalía ni con los culpables" y agregó que, incluso, algunos familiares "dudan de que sean las chicas las halladas" asesinadas, expresó Balboa en declaraciones a Radio Provincia de Buenos Aires.




"Nosotros sostenemos que la querían raptar para llevárselas, insistimos en eso. Ellas el 22 de febrero tenían todo preparado para regresar", dijo en ese sentido Renato Menegazzo, padre de Marina, quien informó que "no van a traer los cuerpos hasta que se hagan todos los estudios correspondientes por parte de los técnicos argentinos".




Esta martes, Gladys Steffani, la madre de Coni, contó que el lunes por la noche llegó a Ecuador para interiorizarse sobre el avance de la investigación del crimen de su hija y de su amiga, e insistió en sus críticas a la investigación desarrollada hasta el momento.




Marina y María José fueron encontradas muertas en una zona de vegetación próxima a las playas de la localidad turística de Montañita, a unos 200 kilómetros de la ciudad de Guayaquil, en Ecuador. Los cuerpos estaban envueltos en plástico y embalados con cinta, según determinaron los pesquisas.




Las chicas habían tenido su último contacto telefónico con sus familiares el lunes 22 de febrero y planeaban regresar a Argentina cuatro días después.




Según los investigadores, el cadáver de María José fue hallado el jueves último tras un llamado a la Policía y el de su amiga Marina el sábado, a pesar de que estaban en la misma zona a unos pocos metros de distancia.




Los pesquisas creen que los crímenes se produjeron la noche del mismo 22 de febrero o la madrugada del 23 y la hipótesis oficial apunta a que se resistieron a un ataque del tipo sexual cometido por los dos hombres que fueron detenidos.






Télam 

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