Karina Jelinek se cansó de las mentiras de Leo Fariña y decidió cortar por lo sano. “Me separé”, le dijo la morocha a la revista Caras. (Foto Archivo)
“Estoy rota. ¡Engaños, mentiras! ¡Me harté!“, agregó la modelo, y dijo que al financista “Lo mandé a la mierda”, porque niega que la engañó. “¡Ahora no le creo nada de nada! ¡Yo presentía que me estaba mintiendo! ¡Nunca estaba conmigo! Siempre decía que viajaba y me dejaba sola“, exclamó, y aseguró que le pidió el divorcio.
Además, al diario Muy, Karina dijo que sabía muy poco de la vida de su marido. “Yo no sabía quiénes eran sus jefes, sus amigos, de qué trabajaba. Con él todo es raro, es un tipo turbio“, afirmó.
También explicó que no le molestaron las chicas que están diciendo que tuvieron “algo” con él, sino que la cosa viene mal de hace rato.
“No fue por las minitas que buscan fama, veníamos mal desde hace un año. Ya no compartíamos nada y me tenía muy abandonada. Cada vez que lo invitaba a mis desfiles o viajes me decía que tenía que trabajar y lo medios repetían: ‘Jelinek siempre con amigas’. ¿Con quién carajo querés que salga si mi marido me deja sola?”, disparó.
La morocha ya habló con su abogada, Ana Rosenfeld, y comenzó el papelerío para tramitar el divorcio. “Confío en llegar a un acuerdo lógico. Leo es incapaz de sacarme nada porque es muy generoso”, resaltó, aunque dejó en claro que para ella es el final.
“Le di muchas oportunidades y quedé como una pelotuda frente a medio mundo. La remé tanto que me quedaron los brazos de Popeye, pero ya está. Ahora no quiero más hombres en mi vida, sólo perros”, finalizó.
“Estoy rota. ¡Engaños, mentiras! ¡Me harté!“, agregó la modelo, y dijo que al financista “Lo mandé a la mierda”, porque niega que la engañó. “¡Ahora no le creo nada de nada! ¡Yo presentía que me estaba mintiendo! ¡Nunca estaba conmigo! Siempre decía que viajaba y me dejaba sola“, exclamó, y aseguró que le pidió el divorcio.
Además, al diario Muy, Karina dijo que sabía muy poco de la vida de su marido. “Yo no sabía quiénes eran sus jefes, sus amigos, de qué trabajaba. Con él todo es raro, es un tipo turbio“, afirmó.
También explicó que no le molestaron las chicas que están diciendo que tuvieron “algo” con él, sino que la cosa viene mal de hace rato.
“No fue por las minitas que buscan fama, veníamos mal desde hace un año. Ya no compartíamos nada y me tenía muy abandonada. Cada vez que lo invitaba a mis desfiles o viajes me decía que tenía que trabajar y lo medios repetían: ‘Jelinek siempre con amigas’. ¿Con quién carajo querés que salga si mi marido me deja sola?”, disparó.
La morocha ya habló con su abogada, Ana Rosenfeld, y comenzó el papelerío para tramitar el divorcio. “Confío en llegar a un acuerdo lógico. Leo es incapaz de sacarme nada porque es muy generoso”, resaltó, aunque dejó en claro que para ella es el final.
“Le di muchas oportunidades y quedé como una pelotuda frente a medio mundo. La remé tanto que me quedaron los brazos de Popeye, pero ya está. Ahora no quiero más hombres en mi vida, sólo perros”, finalizó.
Exitoína
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