Ya en el corto plazo, "entre el domingo y el lunes las lluvias serán generalizadas. La oferta de agua impacta negativamente en el sur de la región pampeana", estimo la CCA para Granar."Desde que se impuso el patrón húmedo, allá por finales de enero, la sobreoferta de agua sólo tuvo pausas temporarias, pulsos secos que permitieron laboreos de cosecha y siembra en condiciones poco usuales, en general desfavorables. El invierno se ajustó a lo esperado en la provincia de Córdoba y el oeste de Santa Fe y si bien estas zonas recibieron buenas lluvias a comienzos de octubre, hoy son las que presentan mayor demanda y la que de algún modo se separan de un comportamiento más húmedo que se sostuvo en el resto de la región pampeana", pronosticó la Consultora Climática Agropecuaria de Aiello para Granar.
Antes de que regresen las precipitaciones del domingo, el aire frío se asentará con un cierto nivel de riesgo sobre el sur de BA. Los pronósticos no están presentando soluciones con temperaturas que caen por debajo de cero, sin embargo es razonable esperar que por sectores, principalmente en las zonas serranas del sur de BA, se observen bolsones donde el enfriamiento de la madrugada del sábado se encamine hacia tocar el punto de congelación. Podemos decir que favorablemente la nubosidad comienza a aumentar durante la tarde del sábado, de otro modo volveríamos a tener otro amanecer riesgoso el domingo. Podemos considerar que el buen grado de humedad que presentan las sementeras pueden moderar el efecto nocivo del frío, no obstante, los cultivares espigados pueden sufrir este fenómeno de todos modos. Como consuelo podemos mencionar que hoy la situación converge en un enfriamiento menor del que se veía a comienzos de la semana.
Volviendo al comportamiento de las precipitaciones, en gran parte de BA, ER, centro sur de SF, buena parte de CB y LP, a comienzos de septiembre los registros pluviales ya habían alcanzado las marcas correspondientes al año. Estamos cerrando el mes de octubre con eventos muy destacaos pero no generalizados. En el sur de LP, sudoeste de BA, norte de BA, gran parte del este de ER, seguramente nos vamos acercando a sumas que nos acercan a quebrar el record de series históricas de 50 años. Debemos destacar que este comportamiento pluvial se da en un año en el que no se puede esgrimir como justificación la presencia de un evento El Niño. Es decir, es otro año que nos impone un comportamiento extremo de una variable muy sensible para la producción agropecuaria y no necesariamente el mismo está vinculado a forzantes climáticos de escala planetaria. Lo más notable de este año, ha sido sin dudas la persistencia de este comportamiento, la cual no parece mostrar una tendencia de cambio hacia el otro extremo, en todo caso es esperable una normalización.
La retracción de las lluvias en CB, SF y oeste de ER, limitan la generalización de este comportamiento, sin embargo hay que remarcar que incluso en estas zonas donde ha llovido menos recientemente, la lluvia anual ha sido abundante.
Como decíamos, al presente la demanda se focaliza en el oeste de la franja central del país. Se esperan buenas lluvias sobre SF, pero con limitaciones en su expansión hacia el oeste, con lo cual en CB, se pueden esperar precipitaciones pero de menores montos. El gran problema es la reaparición de lluvias de importancia sobre el norte y el sur de BA. De concretarse este escenario, nuevamente la oferta de agua no coincide favorablemente con las zonas de mayor demanda.
Las zonas agrícolas del norte tampoco están recibiendo las precipitaciones necesarias, aunque entramos en un período que parece favorable para que las mismas se concreten. Para el NOA, estos días de precipitación que se irán sucediendo, afianzan el quiebre de la estación seca y avalan la posibilidad de iniciar las siembras, esta misma situación en el NEA puede considerarse un atraso respecto del comportamiento usual. A esta altura los suelos chaqueños y del ese de Santiago, ya deberían haber recuperado al menos en parte sus reservas. Por lo pronto las mismas están ajustadas, pero este período húmedo puede generar recargas superficiales que permitan avanzar con las siembras.
El despliegue de este período de inestabilidad en el norte del país ha promovido un cambio en el agobiante régimen térmico que padeció la región en gran parte de octubre. Las máximas en varias localidades de la región superaron los record del mes de octubre, con registros que llegaron a superar los 45°C. Este comportamiento de las temperaturas completó el combo de condiciones extremas, que terminaron exigiendo las reservas hasta empobrecerlas hasta niveles que impiden cualquier laboreo.
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