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Foto: El Litoral | 
El goleador histórico está “colgado” con 4 amarillas y se viene Racing en Avellaneda. Si lo amonestan, no podrá despedirse de su gente en Santa Fe.


Se sabe: nunca un interés individual —jugador, entrenador, dirigente— puede estar por encima de la institución. No sólo en el fútbol, sino en cualquier deporte. Pero, también se sabe, Esteban Oscar Fuertes no es algo más en Colón. Instalado como goleador histórico en los registros de AFA con 140 anotaciones y cerca de los 300 partidos con la camiseta rojinegra como el jugador con más presencias en el profesionalismo sabalero, el “Bichi” está escribiendo los últimos capítulos de una historia de amor incomparable desde que lleva la “20” en la espalda.

Con varios ciclos en la institución, millonarias transferencias al exterior, el orgullo de haber sido goleador del fútbol argentino y siendo convocado a la Selección Argentina, se trata —sin discusión— en el jugador más importante de los últimos años y en el ídolo máximo de varias generaciones.

Lo concreto es que Fuertes anunció y ratificó que este es su último campeonato porque deja el fútbol. Es más, tiene planes concretos para irse unos meses a vivir a España, desenchufarse y después ver cómo sigue. Tiene algunas propuestas empresariales para la organización de su partido despedida, que sería en diciembre, el día que cumple 40 años.

El “Bichi” jugó ayer “colgado” con cuatro amarillas y no fue amonestado por el árbitro Diego Ceballos. Y si bien protestó como siempre, no hubo una actitud “alevosa” del goleador por buscar esa quinta amarilla.

¿Por qué la especulación? Porque cuando Colón juegue frente a Racing —se habla del viernes 8 o sábado 9 en Avellaneda—, Fuertes ingresará con cuatro amarillas en el Cilindro. Y si por cuestiones de juego (una protesta, una infracción en una pelota dividida) recibe una amarilla, se perderá el partido con Godoy Cruz, con lo cual no podría despedirse en Santa Fe de la gente de Colón. Y más allá que tendrá su partido de homenaje y despedida en diciembre, sería una verdadera pena que no tenga su capítulo final ante 30.000 almas en el Cementerio de los Elefantes.

Esto, más allá de cualquier postura, es algo que se merece Fuertes y es algo que se merecen los hinchas de Colón. “Bichi” debe jugar contra Godoy Cruz y los hinchas quedarse con el último recuerdo profesional en casa.

Ahora bien, ¿cuál será la postura a seguir en este caso? Conociendo la seriedad del manager (Batistuta), del entrenador (Sensini) y del mismo jugador (Fuertes), primero está Colón.

En algún momento se pensó en un 225 por Carlos Martín Luque que está con el Sub 20 en Sudáfrica, pero la realidad indica que cuando se juegue Racing-Colón el combinado juvenil ya estará de vuelta en la Argentina. Salvo que Luque vuelva lesionado.

Si bien muchos piensan que Fuertes es grande y sabe cómo manejar un protesta adentro de una cancha, lo cierto es que tampoco puede andar “regulando” si tiene que poner la pierna en una pelota dividida con los jugadores de Racing.

Ayer, en todos los rincones del estadio, se pudo ver a muchos simpatizantes sabaleros con remeras personalizadas haciendo mención a la despedida del “20” contra Godoy Cruz dentro de dos fechas en el Cementerio de los Elefantes.

Sin Chevantón (ya rescindió), con Higuain marcando su último gol en febrero, la levedad de Leandro González y con el pibe Alario recién sumando los primeros minutos, hoy Fuertes es titular indiscutido de cara a las tres fechas finales (Racing, Godoy Cruz y Banfield).

Colgado con 4 amarillas, se viene Avellaneda antes que el capítulo final en Santa Fe. Sin ganar de visitante en todo el campeonato y perdiendo anoche en casa un invicto de diez fechas, lo único que le falta a Colón en este final es no poder despedirlo a “Bichi” con un estadio repleto contra Godoy Cruz.

El Litoral

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