La cantante sale de una controversia y se mete en otra. Parece que, al menos para ella, todo vale para ganar millones.
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A pocos
días de las duras críticas que recibió Jennifer López por haber
acumulado unos 10 millones de dólares cantando para dictadores y
personajes acusados de delitos de lesa humanidad, uno podría imaginar
que la diva del Bronx aparecería en algún evento benéfico para lavar su
imagen... Pero no.
La cantante acaba de inaugurar la primera de una serie de tiendas de teléfonos móviles que llevan su nombre, en pleno barrio de Brooklyn, Nueva York. La cantante aseguró en una entrevista que la razón por la que incursionó en este negocio es porque la compañía de celulares Verizon no sabía bien cómo conquistar el segmento latino de este mercado.
JLo no sólo les enseñó a los empresarios cómo somos los latinos, además aseguró algo así como que tener un celular es fundamental para la vida. Por sus palabras, casi sonaba como una obra benéfica. Pues parece que para Jennifer los móviles son casi tan fundamentales como los derechos humanos. Y uno puede pensar entonces... ¿los regala? No, es una tienda como cualquier otra donde un celular viene con un contrato de servicio.
Lo cierto es que la cantante no solo tiene éxito en la pantalla grande, sino que desde hace muchos años es una empresaria exitosa en distintos rubros. Tiene un restaurante, una línea de ropa y otra de perfumes, y una compañía productora. De hecho, hace unas semanas se lanzaba un canal de televisión en el que ella dirige la programación y al cual presta su nombre e imagen, a cambio de una jugosa suma.
Defendiendo ahora el derecho de la comunidad latina de Estados Unidos (a comunicarse por celular), JLo sigue consagrándose como empresaria y artista.
Fuente: Suco Press
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