Actualmente se utiliza la combinación MBZ, de acuerdo al registro nacional, mostrando mayor movimiento de ventas de automóviles a partir de 2010, ya que desde ese momento transitaron la J, K y L para encabezar las chapas de los cero kilómetro. (Foto Archivo Télam)
El año 2012 concluyó con 5.440 vehículos patentados en la Municipalidad de Rafaela, lo que en sí representó una caída del 12 por ciento de las ventas, en comparación con las estadísticas de 2011. A esto se puede añadir también la caída en la venta de motos, que con una baja del 17,5 por ciento, concluyó un año de menor actividad económica en el rubro.
Sin embargo, es interesante ver la evolución del sector a través de una pauta tan sencilla como la denominación de las patentes.
Desde la oficina de Patentamiento municipal surgen datos interesantes, partiendo de diciembre de 1999 a diciembre de 2002, cuando en medio de la crisis y en tres años se patentaron 2.578 automóviles, empleando la letra D para encabezar las chapas, dependiendo del Registro Nacional del Automotor, para esa asignación.
Entre noviembre de 2002 y junio de 2005, también se utilizó una letra en tres años, siendo la E, para 2.749 patentamientos en ese lapso.
A medida que se afianzó la salida de la crisis y una mejora económica en el país, a nivel general, se empezaron a acortar los plazos, entonces la letra F se empleó en la ciudad para patentar 2.438 autos entre junio de 2005 y enero de 2007. La brecha siguió acortándose entre enero de 2007 y marzo de 2008, abarcando la letra G a 2.193 vehículos.
Cuando el impacto económico de la crisis del campo y de la caída internacional se hicieron sentir, el consumo de las letras mantuvo un patrón estable de tiempo y cantidades de pantentamientos, ya que entre febrero de 2008 y abril de 2009 con la letra H, se inscribieron 1.856 autos; y con la I se iniciaron las chapas de 1.752, entre abril de 2009 y agosto de 2010.
Con el impulso del gasto, el escape inflacionario y la necesidad de inversión para asegurar los ahorros, fueron muchos rafaelinos los que optaron, como en el resto del país, a la compra de automóviles, acelerando el consumo de letras para el registro automotor. La letra J permaneció de junio de 2010 al mismo mes de 2011, incluyendo a 1.784 autos a nivel local, mientras que la K tuvo menor permanencia, de mayo de 2011 a marzo de 2012 para 1.691 vehículos.
Finalmente, la letra L se sostuvo entre marzo de 2012 y diciembre del año anterior, con 1.607 autos.
Actualmente, las patentes que se emiten en la ciudad ya cuentan con la combinación MBZ, lo que demuestra que el ingreso al nuevo año y la búsqueda de modelos más nuevos cero kilómetro.
En tanto, para la industria automotriz en general, el pasado no fue un año tan positivo, buscándose para 2013 recuperar cifras de venta, tal como lo expresara la Asociación de Concesionarios de Automotores (Acara) al concluirse 2012. Se seguirán empleando las estrategias de planes de ahorro previo, financiación, promociones y descuentos para todas las líneas de vehículos nuevos, para promover las ventas, que incluso tuvieron caídas notorias en las transferencias de usados durante el año anterior, misma situación presentada en utilitarios, colectivos, acoplados y semirremolques.
La Opinión
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