El arzobispo de Buenos Aires hoy
se dirigió a la multitud congregada frente a la iglesia de San Cayetano,
en Liniers, durante la misa central que pronunció en el marco del Día
del Patrono del Pan y del Trabajo. (Foto Archivo)
Poli repitió el mensaje de Bergoglio al asegurar que "el Papa dice que bajen y busquen al que más lo necesita; vayamos al encuentro de los más pobres sin preguntarles la religión", y pidió que "recen por Francisco".
Frente a la multitud agolpada sobre las puertas de la iglesia, el arzobispo porteño dijo que "el sacrificio, la vigilia, el madrugón y la distancia valen la pena porque la fe nos mantiene vivos, nos devuelve la vida".
"San Cayetano nos vuelve a decir una vez más, tengan confianza, vuelvan a Jesús, el amigo fiel que soportó la cruz"
Frente a la multitud agolpada sobre las puertas de la iglesia, el arzobispo porteño dijo que "el sacrificio, la vigilia, el madrugón y la distancia valen la pena porque la fe nos mantiene vivos, nos devuelve la vida".
"San Cayetano nos vuelve a decir una vez más, tengan confianza, vuelvan a Jesús, el amigo fiel que soportó la cruz"
Mario Poli, arzobispo de Buenos Aires "San Cayetano nos vuelve a decir una vez más, tengan confianza, vuelvan a Jesús, el amigo fiel que soportó la cruz", enfatizó.
La multitud, proveniente de distintas localidades del conurbano bonaerense, de la ciudad de Buenos Aires y del interior del país, llegó a la iglesia de Liniers para pedir "paz, pan y trabajo" y para agradecer.
La primera persona en ingresar, en silla de ruedas, fue Edgardo Zappoli, del barrio de Monte Castro, cercano a la iglesia, posteriormente lo hizo una mujer de rodillas envuelta en una bandera argentina.
El ingreso de los primeros fieles ocurrió a las cero hora y fue precedido por fuegos artificiales que iluminaron la noche, mientras la banda de la Policía Federal interpretaba el Himno Nacional y la Marcha de San Lorenzo.
Rodeados de
puestos y gente vendiendo espigas, figuras del santo, velas, rosarios y
flores, la gente formaba filas que se extendían hasta la cancha de
Vélez Sarsfield, más de siete cuadras.
Una de las colas, la más rápida, era para visitar al santo, entrar al santuario y mirar de lejos a San Cayetano, en tanto la lenta, era para las personas que iban a tocar al santo y agradecerle.
Entre una multitud, que había desde personas mayores con alguna dificultad para caminar, hasta matrimonios jóvenes con hijos pequeños, estaba Marcela, una mujer de 38 años que había llegado con su hija de 15 desde la localidad de José C Paz, para "agradecer a San Cayetano".
"Nosotras venimos siempre desde hace cinco años", dijo y añadió que "estamos acá desde hace una hora y media y la espera lo vale, yo soy devota de San Cayetano que me dio trabajo y cada vez que puedo me acerco a la iglesia aunque hoy, 7 de agosto, es un deber venir".
Por su parte, Sara otra mujer que desde hace 15 años visita el santuario de Liniers, proveniente de Zárate, buscó sacarse fotos con una figura de la virgen bendecida por el Papa Francisco, y entre lágrimas dijo a Télam que viene a agradecer porque "San Cayetano es un santo muy bueno que le ha dado trabajo a mis cuatro hijos".
Una de las colas, la más rápida, era para visitar al santo, entrar al santuario y mirar de lejos a San Cayetano, en tanto la lenta, era para las personas que iban a tocar al santo y agradecerle.
Entre una multitud, que había desde personas mayores con alguna dificultad para caminar, hasta matrimonios jóvenes con hijos pequeños, estaba Marcela, una mujer de 38 años que había llegado con su hija de 15 desde la localidad de José C Paz, para "agradecer a San Cayetano".
"Nosotras venimos siempre desde hace cinco años", dijo y añadió que "estamos acá desde hace una hora y media y la espera lo vale, yo soy devota de San Cayetano que me dio trabajo y cada vez que puedo me acerco a la iglesia aunque hoy, 7 de agosto, es un deber venir".
Por su parte, Sara otra mujer que desde hace 15 años visita el santuario de Liniers, proveniente de Zárate, buscó sacarse fotos con una figura de la virgen bendecida por el Papa Francisco, y entre lágrimas dijo a Télam que viene a agradecer porque "San Cayetano es un santo muy bueno que le ha dado trabajo a mis cuatro hijos".
"Vengo a agradecer que tengo trabajo, que mis hijos también lo tienen y a
pedir para que lo sigan teniendo", dijo Facunda de Monte Grande poco
antes de ingresar a la iglesia.
Natalia de Bella Vista, mientras caminaba con Guadalupe, una beba de 3 meses en brazos, manifestó: "voy a agradecer que tenemos trabajo y que mi familia está bien".
Por su parte, el cura párroco de San Cayetano, Jorge Torres Carbonel, sobre la gran cantidad de fieles que expresaban su agradecimiento, sostuvo que "hoy el día de la fiesta del santo, no lo quieren molestar, vinieron a festejar".
Consultado sobre el motivo de su presencia, Alberto de Rafael Castillo sostuvo: "quiero agradecer que nunca perdí el trabajo".
"Quiero agradecer que tengo trabajo y que en el país sigamos por este camino, es lo que más voy a pedir", agregó Lorenzo de Moreno.
Natalia de Bella Vista, mientras caminaba con Guadalupe, una beba de 3 meses en brazos, manifestó: "voy a agradecer que tenemos trabajo y que mi familia está bien".
Por su parte, el cura párroco de San Cayetano, Jorge Torres Carbonel, sobre la gran cantidad de fieles que expresaban su agradecimiento, sostuvo que "hoy el día de la fiesta del santo, no lo quieren molestar, vinieron a festejar".
Consultado sobre el motivo de su presencia, Alberto de Rafael Castillo sostuvo: "quiero agradecer que nunca perdí el trabajo".
"Quiero agradecer que tengo trabajo y que en el país sigamos por este camino, es lo que más voy a pedir", agregó Lorenzo de Moreno.
Télam | Cadena3
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