Foto Arch.: El Litoral |
Señales concretas confirman que ya se tocó fondo. Pero sin crédito ni exportación, la ganadería se debate en retomar el crecimiento en un marco de intervención y falta de previsibilidad. Hay menos liquidación de vientres pero la actividad demorará en recuperarse.
El cóctel de sequía más intervención estatal con cierre de las exportaciones significó un golpe mortal para muchos productores que salieron de la actividad para siempre, y que condicionó al mercado. Para los que malvendieron sus animales, volver a invertir se hace prácticamente imposible. “Para el que vendió su vaca a $ 300, pagar $ 4.000 por ese animal no resulta viable”, resume Miguel Romano, referente de la Cooperativa Guillermo Lehmann.
Para el especialista, lo que bajó fue la cantidad de envíos a faena y se levantó el kilaje mínimo, por lo que, al no faenar el ternero liviano, el carnicero está comprando el novillo o la vaquillona más pesada. “El novillo para exportación se volcó al mercado interno y se empezó a consumir”, completa. Según Romano, el mismo bajó de 70 a 55 kg., pero el stock se va a recomponer no porque hagamos más cría, sino porque los rodeos serán más eficientes y los terneros se retengan un poco más en el campo.
“Es más, hay un dato que no resiste argumentos. Ninguna provincia aumentó su stock. Incluso algunas siguen retrocediendo. Salvo Buenos Aires, porque tiene muchos campos ganaderos grandes por excelencia, que al contar con una buena cantidad de vientres retuvieron sus terneras”, indicó.
En el norte de Santa Fe tenemos campos no aptos para la agricultura que no son utilizados “porque no hay plata para ponerle hacienda adentro; están vacíos, a nadie le interesa invertir en ganadería, la plata se vuelca a un departamento”, asegura.
Finalmente, Romano aclara que para recomponer el stock, hay que bajar más aún el consumo y abrir la exportación. “Tenemos 47 millones de cabezas aunque para la tribuna está todo bien”, dice. Y augura: “a fin de año va a faltar carne porque los feedlots se vienen achicando, no cobraron más los subsidios y venden la hacienda para poder pagar los créditos”.
Medidas y des-medidas
Para Víctor Tonelli, analista ganadero, continúan vigentes las políticas de intervención del mercado, y la limitación a las exportaciones es la mismas que en los últimos 6 años.
“A partir de la caída de 11 millones de cabezas y la suba de precios, el productor ve que el negocio vuelve a tener rentabildad. Pero el que se fue ya no vuelve, salvo que tenga ingresos de otra actividad para solventarlo, pero un ganadero que liquidó su stock a U$S 150 no puede reponerlo a 1.000”, coincide.
Con respecto al faltante, Tonelli es más específico. “Ya estamos en un faltante de oferta que se va a mantener hasta fin de noviembre. De acá a 4 años esto es irreversible; el consumo actúa en función de la oferta porque la carne es un producto perecedero. Todo lo que se ofrece se consume a un precio dado, si es mucho será barato y si es poco será caro, pero se sabe que en los próximos 4 años va a ser poco. Se consume poco porque se ofrece poco. Se consume menos, no porque el precio es alto; el precio es alto porque la oferta es insuficiente”, concluye el especialista.
La tendencia es clara: si hubiera más oferta, el precio bajaría, pero esto no ocurrirá hasta 2014 (por lo menos). Para Tonelli las políticas no cambiaron, y lo que pasó con el maíz y el trigo es otro ejemplo claro. “Ellos tienen otra visión de los mercados, los intervienen y quitan expectativas. Con respecto a la siembra de trigo y maíz, si no dan previsibilidad vamos al fracaso, pese que ahora se va a sembrar por la alta demanda mundial que sostendrá la firmeza en los precios”, aseguró.
Vacunación
Según adelantaron fuentes del Senasa, la campaña de vacunación del departamento La Capital comenzará en concordancia con la de Las Colonias y Castellanos, el 15 de septiembre. Vale aclarar que en esta edición se inocularán todas las categorías bovinas exceptuando a vacas y toros.
Por Federico Aguer | El Litoral
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